Thursday, November 1, 2012

INVENTOR. © Carlos de la Parra. micro versión ESPAÑOL---ENGLISH version. Sólo para mujeres que quieran estar actualizadas y para hombres que aprecien la belleza . ( Exclusive for beauty conossieurs and women with the latest updates.)

La tormenta le arrebató sus barriles de oro y solo cargaba un parco sobrante en monedas antiguas al llegar al gran mercado cercano a Casablanca, a donde los compradores de las caravanas se surtían de mujeres para poblar los harenes.Para colmo de su mala fortuna, el mercader Alfonso de Gavis, arribó con retraso y ya  habían vendido a todas.
No queriendo regresar solo, pidió que  quitaran la cadena del cuello a la muchacha de la burka que permanecía cabizbaja sobre la plataforma, y pagó un precio muy razonable por tratarse de la última esclava en venta.
Habiendo zarpado notó que la joven era muy acomedida y no sólo pescaba bien sino además cocinaba con exquisito gusto; lo cual le dió cierto consuelo, ya que estaba seguro de que la vendían vestida de burka para disfrazar una cara fea. Y no estaba muy lejos de la verdad. Un buen día le ganó la curiosidad y le pidió  descubrirse el rostro y francamente , sin exagerar la chica era tan narizona que cualquier tucán junto a ella parecería un bulldog.
Decidió no rumiar éste pensamiento para no sentirse estafado. Ella después de todo dominaba la pesca y la cocina, una vez que llegaran a Río de Janeiro podría recuperarse poniéndola a cargo de un chiringuito en la playa para atender al turismo.
Volvió a verse en una tormenta aún peor que la de antes, luchó como enajenado con el timón para evitar el naufragio , y fué un milagro que se salvaran pero quedó agotado por  combatir contra el oleaje.
Ya navegando en calma la enseñó a llevar el rumbo y durmió para reponerse.
Dicen que el golpe de los tambores surge del ritmo del corazón. Y entre sueños Alfonso de Gavis podía escuchar un tamboreo de pies junto con sus propios latidos. Entreabrió los ojos para ver una figura borrosa que danzaba llevando éste compás que le brindaba una sensación de alivio. Al enfocar bien pudo advertir que ella estaba totalmente desnuda y que tenía el cuerpo más maravilloso que hubiése jamás contemplado igual. Los giros que daba en su baile mostraban con detalle la exquisitez de cada centímetro de piel femenina, colocando a Alfonso en un trance erótico intenso. Sobre todo de espaldas donde sus curvas destacaban unas perfectas nalgas bajo la cintura diminuta que contoneaba sus movimientos rítmicos.El resto de su cuerpo, en especial sus piernas eran un poema viviente. Más al dar vuelta ella y quedarle de frente, su espeluznante narizota rompió gran parte del encanto, lo cual resultó un shock insoportable . Intentando recuperar la imagen de perfección, tomó la burka y con unas tijeras recortó la parte que cubría cabeza y rostro, y al ponérselo vió ante sí su instante eureka. Acababa de inventar el burkini que lo haría millonario. Lo de la nariz sería resuelto por un amigo cirujano en Brasil.
Renunció a sus tareas de tratante de esclavas.
Las playas de todo el mundo se vieron inundadas por burkinis al siguiente verano.
Resuelven la amenaza de cáncer facial, disfrazan a las feas, pero también las bonitas se han visto atrapadas por el furor de la moda. Hasta en las playas nudistas han comenzado se les vé pasar en cueros y con el burkini cubriendo solamente la cabeza.

ENGLISH VERSION.

The storm at sea snatched away from him a pair of barrels full of gold that was destined for payment of his merchandise. He had managed to save a small amount in his pockets, and also had arrived late to Casablanca due to the bad weather, so by the time he reached the market square where they sold the women to suppliers of harems, all that was left was a young girl in her early twenties covered head to toes in a burka. And he got a reasonable price for her, since they were eager to close for the day and be free to go their own ways .
Back on the boat he noticed the girl was a hard worker and could even fish and cook great, so he avoided looking at her face so as not to feel swindled on the deal, that burka clearly meant to him she must be quite ugly, otherwise they would have exposed her face. For the great price he got, it was a good deal just to have her as a helping hand on the boat, and perhaps when he arrived in Rio de Janeiro he could open a beach seafood joint where she could apply her talents to his profit.
But one day curiosity got the best of him. He asked her to remove her headpiece to find out his hunch was not wrong by far. This girl's huge nose would in comparison make a toucan seem like a bulldog .

Again he had to single handedly fight the storm all night long, this left him exhausted, so once the sea calmed down he taught her how to stay on course and fell asleep right on deck.
It seems that all percussions and drum beats imitate the rythm of the heart according to the opinion of most musicians, and that was very  likely taking place inside his body as he came to that half awaken feeling when you wake up from fatigued sleeping . He felt the thump thump in his chest pounding in synch with feet performing steps that danced next to where he rested. The girl had her back to him and performed hip contortions in slow motion as her feet stomped with that chardiac beat. His gaze focused on her marvelous nudity. A poem made of female skin. A perfect pair of buttocks and those precious legs. But then as she spun around her nose broke the spell. That face could stop a train. But something in that perfect body compelled him to recover the divine goddess that so recently had him mesmerized. So he grabbed the scissors and cut off the headpiece of the burka to cover that hideous face and asked her to dance on for him. As she regained her floating appearance his eureka moment came along. The nose would be an easy task for his friend the plastic surgeon. But his major vision lay in what he had invented right then and there.
The burkini. It exploded as head dress for every female body in beaches worldwide. Turning him into a bona fide millionaire. He left slave trading behind, and had his invention protecting ladies' faces from skin cancer, on both the beautiful and the homely.